Las varices son uno de los problemas que más tememos las mujeres, debido al dolor que ocasionan a quien las padece, así como el antiestético problema que supone a la hora de enseñar nuestras piernas en público. Básicamente su aparición es debido a problemas circulatorios, aunque existen varios factores que pueden agravar la situación como la vida sedentaria, muchas horas de pie o el sobrepeso, entre otros motivos que pueden provocar una aparición más rápida.
La cirugía láser de varices es un remedio muy eficaz que lograr eliminar las feas varices que aparecen en las piernas de las mujeres, logrando que luzcan mucho más bonitas, sanas y tengan la apariencia que se merecen. La cirugía láser de varices es un tratamiento apenas invasivo para la paciente, por lo que el riesgo que contraer ningún tipo de infección o problema posterior a la operación es muy escaso.
Este tratamiento se centra en quemar la vena o cauterizarla, para de este modo cerrar aquellas venas que poseen un tamaño anormalmente grande. Es importante saber que este tratamiento puede ser utilizado tanto para mejorar el aspecto estético de la piernas como para aliviar el dolor que producen las varices en las piernas, eliminando los dolorosos síntomas que provocan. Las varices no sólo son un problema muy doloroso y antiestético, también conllevan una serie de problemas asociados como la decoloración de la piel, hinchazón de la zona, inflamación, irritación, e incluso en los peores casos llagas en piel o ulceras.
La ventaja de la cirugía láser de varices es que logra unos resultados sorprendentes sin necesidad de realizar incisión quirúrgica, con un mínimo corte, de modo que no sólo es mucho más seguro de cara a infecciones, sino que no deja ningún tipo de cicatriz en el paciente. Tampoco se puede olvidar mencionar que prácticamente al momento después de la intervención, el paciente notará una considerable mejoraría en cuanto a los síntomas sufridos por las varices.