Mente clara

Con la llegada de un nuevo año, un nuevo curso o simplemente cambio de estación, muchos son los propósitos que nos proponemos y que la mayoría de ellos abandonamos con el tiempo o nada más empezar.

Es importante que a la hora de plantearnos alguna actividad nueva, pensemos con detenimiento lo que nos va a suponer en el día a día. No debemos de emprender proyectos que no seamos capaces de terminar. Pues esto irá cayendo en nuestra cabeza como una loza.

Si con la llegada del buen tiempo pensamos en apuntarnos al gimnasio, deberíamos ir poco a poco,  empezar con pocos días e ir aumentándolos en relación a lo que queramos conseguir. Lo mismo pasa con cursos y demás propósitos.  Es mejor ir lentos pero seguros, de esta forma nuestra rutina no se verá tan alterada y las actividades extras no se convertirán en obligaciones y agobios para nuestras vidas. psicologo en Valencia.

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